¿Qué he estado escuchando esta semana? Semana 32/2025

Después de nueve años sin publicar nada, los alemanes Sacred Steel vuelven a la carga con Ritual Supremacy. Se trata de un disco de heavy metal clásico, en el que potencia y contundencia priman por encima del doble bombo supersónico más propio del power metal alemán, más cerca de Accept que de Helloween, por ejemplo. Temas con buenos riffs y melodías, repletos de estribillos coreables son las señas de identidad del álbum, que deja una buena impresión final.

Unreqvited en realidad es el alter ego del músico William Melsness, quien se encarga de todas las voces e instrumentos (salvo por un par de solos de guitarra y alguna orquestación). De su mente sale este A Pathway to the Moon, un disco de post-black metal melódico y atmosférico que juguetea con el shoegaze y el ambient. Así, las guitarras rítmicas suenan crudas y agresivas, pero se van repartiendo el protagonismo con los teclados y orquestaciones, mientras que las guitarras solistas llevan reverb como para parar un tren, dándoles ese sonido sostenido en el tiempo (el eternal riff). Las voces tan pronto son agresivas y rasgadas como limpias, llegando a haber un tercer tono, una especie de falsete cercano al pop. La verdad es que la conjunción de elementos queda muy bien, para un disco bastante original y muy resultón.

Doble álbum en directo el que nos presentan los veterano Cirith Ungol, casi contemporáneos de Black Sabbath, y que, como los británicos, están de gira de despedida. Así, editan este álbum en directo,  Live at The Roxy, que recoge 20 temas de toda su carrera y en el que su heavy metal clásico con ramalazos doom metaleros (o su versión primigenia) luce como nunca. Temas que juegan con partes rápidas y pesadas, riffs de guitarra pegadizos y algún buen estribillo componen los temas que nos dejan los californianos. Un buen documento de lo que es el legado de unos pioneros del heavy metal, quizá no lo suficientemente reconocidos.

A pesar de que este Primacy Arrival es el debut discográfico de Axiom Chaos, lo cierto es que los integrantes de este dúo han pasado ya por unas cuantas bandas de death metal, lo que les hace unos veteranos de la escena. Aquí nos ofrecen death metal brutal y técnico, con una producción contundente y espesa que levanta un muro de sonido. Hay ritmos brutales sobre los que ejecutan riffs intrincados, pero en esencia su propuesta está bastante manida, y tampoco es que los temas destaquen especialmente.

Dös es en realidad una one-man-band de puro black metal sueco y Det Eviga och den Döde es su primer álbum, aunque, en realidad, tiene trampa: se trata de la regrabación del disco publicado en 2011 bajo otro pseudónimo. Canciones largas, edificadas sobre riffs oscuros e impenetrables que dotan de un aire frío y gélido a los temas, sobre los que una voz desgarrada recita las letras. Los temas son largos, lo que permite ir introduciendo distintos arreglos a lo largo de ellos, pero a pesar de tener buenos mimbres, no es un disco que me haya terminado de enganchar.

El black/thrash metal es una cosa muy vieja, ya desde principios de los 90 había bandas con un pie en ambos estilos y Sarcator son herederos de aquellos tiempos. Swarming Angels & Flies es un disco que aúna el black/thrash rápido y furioso con los arreglos, solos y melodías del thrash metal, todo ello dotado de una producción limpia y nítida que realza la potencia de los temas. Además, de vez en cuando bajan un poquito las revoluciones, metiendo partes más pesadas que dan un respiro al oyente. De hecho, es cuando más lucen, demostrando que saben escribir riffs potentes y pegadizos. No está mal, aunque puede ser un poquito demasiado intenso.

This Gift is a Curse es una brava banda sueca que lleva ya unos años en activo, pero no ha sido hasta Heir, su cuarto álbum, que no he tenido conocimiento de ellos. Su propuesta aúna black metal, metalcore y algún ramalazo de sludge, mezcla explosiva a priori. Lo cierto es que la producción es la propia del metalcore, con un sonido de guitarras muy saturado y un cierto aire electrónico, aunque la batería suena más natural de lo habitual en estas producciones. Los temas son largos, llenos de cambios entre una y otra influencia, y a pesar de tener momentos interesantes, a mí el disco se me ha hecho muy largo.

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